El espíritu del cronopio mayor corretea por la 40ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires: figura y obra de Julio Cortázar se despliegan en numerosos homenajes, exposiciones, espectáculos y fotografías por el predio de La Rural, mientras sus libros siguen convocando a lectores de todas las edades.
Uno de los ejemplos es la exhibición de primeras ediciones de sus textos, que pertenecen al coleccionista Lucio Aquilanti, y que están expuestas en el stand del Ministerio de Educación para recordar el centenario del nacimiento de Cortázar. Entre ellas se destacan ejemplares de dos títulos previos a su partida a París, en 1951: los poemas de “Presencia”, publicado bajo el seudónimo de Julio Denis (1938), y la obra de teatro “Los reyes” (1949). También se encuentra el cómic “Fantomas contra los vampiros multinacionales” (1975), con una faja azul que indica: “Los beneficios de la venta de este libro serán entregados al pueblo de Nicaragua”.
Escritor y educador
En un muro del stand se ve un texto de la época en que el emblemático escritor se desempeñó como docente en la provincia de Buenos Aires: “Esencia y misión del maestro”. Asimismo, en una publicación de Chivilcoy, de 1939, Cortázar decía: “Doble tarea, pues: la de instruir, educar, y la de dar alas a los anhelos que existen, embrionarios, en toda conciencia naciente”.
También la Secretaría de Cultura de la Nación le hizo un espacio en su stand. Allí puede verse una exhibición digital del cuaderno de bitácora de “Rayuela”, una de las insignias del “boom” latinoamericano. Sus 164 páginas reúnen frases, ideas y dibujos que dan cuenta del proceso creativo de la novela. En la primera página anuncia: “El libro se podrá leer: 1) siguiendo el orden de las remisiones 2) Como cualquier libro. Tenerlo presente al hacer el shuffling”.
Asimismo puede escucharse la característica voz de Cortázar, arrastrando las erres (a la manera francesa), leyendo poemas y narraciones grabados en Casa de las Américas en 1978 en La Habana, entre ellos “No, no y no” y “Louis, enormísimo cronopio”.
Interés de los jóvenes
Sus libros continúan vendiendo masivamente. “Creemos que eso tiene mucho que ver con el público joven, que sigue incorporándose como lector de Cortázar”, dice Leonardo Rubini, jefe de ventas de Prisa Ediciones. “Esa cuestión casi experimental de su escritura hace que muchos jóvenes se sigan interesando en su lectura, tanto en sus cuentos como en sus textos un poco más difíciles, como ‘Rayuela’”, agrega. Esta novela, protagonizada por Oliveira y la Maga, es la más vendida. La siguen dos obras publicadas recientemente: el álbum biográfico “Cortázar de la A a la Z” y “Clases de literatura” del escritor en Berkeley. “En general, demandan toda la obra de Cortázar, básicamente ‘Bestiario’, ‘Historias de cronopios y de famas’, ‘Libro de Manuel’. Pero se vende todo”, informa un vocero de la editorial Alfaguara.
Narraciones y recitales
La misma agenda de la Feria incluye muchísimas actividades de homenaje a Cortázar: mesas redondas, espectáculos de narración oral y recitales de música.
“Me parece muy bien y muy justo respecto de un autor que nos representa cabalmente en un momento de la historia argentina y de la historia de nuestra literatura”, apunta su biógrafo, Mario Goloboff, quien participa de algunas de estas actividades. “La obra cortazariana todavía no ha alcanzado el lugar de lectura, de estudio, de análisis, de interpretación que merece en los homenajes”, advierte quien es autor de “Leer Cortázar: la biografía”.
Entre los aspectos más perdurables de los libros de Cortázar, Goloboff destaca “los cambios que introdujo en el sistema del cuento fantástico, los diferentes modos de lectura que planteó, el cuestionamiento del papel del lector y de su función, las alteraciones del objeto ‘libro’ que postuló teóricamente y en la práctica. En fin, muchas cosas más que fueron verdaderas innovaciones, que venían de antes, pero que él planteó con fuerza y encanto”.
Para grandes y chicos
Las múltiples mesas redondas que se celebran por estos días abordan entre otros aspectos la relación del autor, nacido en Bruselas en 1914, con la política, la música y el cine. Un encuentro que analizará filmes basados en obras de Cortázar contará con su amigo y cineasta Manuel Antín, quien rodó “La cifra impar” y “Circe” sobre cuentos del escritor.
Mientras, el proyecto “Literatura que suena” del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires ofrece una versión del célebre relato “Casa tomada” en versión de cuarteto surf, con música de l argentino Simja Dujov. Y recreando el juguetón espíritu cortazariano, el visitante puede introducirse además en un recinto a contestarle cinco preguntas a una computadora, que determinará de manera inapelable si es “cronopio, fama o esperanza”.
No sólo los lectores adultos están invitados a acercarse a Cortázar. Habrá talleres de escritura creativa para los más pequeños, convocados a imaginar por ejemplo “¿Qué será un cronopio?”
“Invitar a los chicos a leer ‘Historias de cronopios y de famas’ es acercarlos, en principio, a un gran autor argentino. Pero fundamentalmente es proponerles jugar -como lo hizo Cortázar- con las palabras y con la imaginación”, dice la autora de literatura infantil y profesora Laura Slutsky, quien dicta los talleres.
“Esta lectura puede ser el primer paso para que en la adolescencia aborden otras obras del escritor y que continúen transitando en la adultez por el mundo literario del gran cronopio”, concluye la especialista.